12 Nov Una ópera de la que enamorarse
«L’elisir d’amore», el clásico de Gaetano Donizetti, llega a Oviedo con un reparto de muchos quilates y un novedoso montaje escénico a cargo de Joan Antón Rechi
→ Nemorino ama a Adina. Aunque está dominado por la pasión, el joven, de natural introvertido, no logra captar la atención de la bella muchacha, pasional e independiente, un volcán en continua erupción. Cuando ha perdido toda esperanza, cuando llega al pueblo un atractivo militar que se interesa por Adina, aparece un anciano que vende, asegura, filtros de amor.
Esto, a grandes rasgos, es el argumento de L’elisir d’amore, la inmortal ópera bufa de Gaetano Donizetti que se estrena esta tarde (19.00 horas) en el Teatro Campoamor de Oviedo. Una pieza maestra de la lírica italiana que, bajo la dirección musical del asturiano Óliver Díaz y a partir de un concepto escénico de Joan Antón Rechi, promete iluminar la LXX Temporada de Ópera con un nuevo e imaginativo montaje que, en palabras de Rechi, aspira a convertir el teatro ovetense en «una botella de champán».
La propuesta escénica de Rechi traslada la acción de esta comedia rural a una fiesta. Se trata de la boda de Giannetta, la amiga inseparable de Adina. Con ello se pretende actualizar la acción dramática, al convertirla en algo mucho más cercano al público: una situación que es posible encontrarla en la vida real. La visión de Rechi pretende además llevar las situaciones cómicas que vienen recogidas en el libreto a su máxima expresión, algo para lo que contará con el talento de un reparto de muchos quilates. El tenor José Bros, una de las voces preferidas del público habitual de la Ópera de Oviedo, encabeza el cartel aportando su solidez escénica a Nemorino. La soprano asturiana Beatriz Díaz le dará réplica como Adina, y Alessandro Corbelli y Edward Parks completan el cuarteto sobre el que pivota la acción de L’elisir d’amore.
El baile también es otro de los elementos claves de la propuesta escénica ensayada por Rechi, llena de color y dominada por un techo compuesto por más de tres mil copas que se mueven según transcurre la acción dramática. Un recurso que permite al escenógrafo la necesaria diversidad de espacios para enmarcar el desarrollo de esta comedia. Un montaje, en definitiva, que promete enamorar al público. Y sin necesidad de filtros.
Adina – Beatriz Díaz
Beatriz Díaz está también de aniversario y con esta ópera la soprano asturiana celebra sus 15 años en los escenarios. Entre sus proyectos destaca la invitación de Riccardo Muti para cantar en el Festival de Salzburgo y el Maggio Musicale Fiorentino. El personaje de Adina es el de una mujer compleja, moderna, independiente, segura de sí misma e inteligente. Tiene poco que ver con el resto de los habitantes del pueblo. Los intentos amorosos de Nemorino la ponen de los nervios: Su ego la llevará incluso a prometerse a Belcore para vengar la indiferencia con la que momentáneamente la trata Nemorino, a quien realmente ama.
■ La Nueva España, 12 de noviembre de 2017 | Andrea G. Torres